jueves, 13 de octubre de 2011

Tutututulio Zuloaga

Otro regreso que nos impulsó a volver fue el de uno de los grandes artistas multimediocres de Colombia (cantante, actor de dramatizados baratos, presentador y locutor radial), pero ahora en versión de chef tropipop: profundidad, filosofía, poesía y sobre todo buen gusto al servicio de lo que es la cocina, ¿tsí?



Sí, se trata de una "de las grandes obras de la humanidad… Tulio Zuloaga", un orgullo paisa tan culto como José Obdulio Gaviria o Doña Gloria que acaba de darle un giro de proporciones ebrias a su vida, convirtiéndose además en un excelso catador de lo que es el vino, ¿tsí?



Pues resulta que este fabuloso ser (que va a la misma peluquería que Leonel Álvarez), además de alcanzar altísimos niveles de rating a la media noche en Teleantioquia –el único canal menos visto que Cablenoticias–, escribe críticas gastronómicas "chiquiticas" en clave de fábula con una lírica sólo comparable con la de "La cachucha bacana" y un sentido crítico que recuerda lo más excelso de nuestros publirreportajes. Además de tutearte, querido blogovidente, este experto enólogo –para los que no saben, en este caso enólogo proviene de heno– filosofa sobre el vino y "las líneas que hacen la diferencia" (guiño, guiño), recuerda a sus ancestros europeos con un pésimo uso del español, viaja sin empacar maletas y charla con un turco (de nuevo: guiño, guiño), nombra a amigos que "llenaron mi boca", "un gran Big Bang" (no confundir con su competencia, Iván y sus Bad Band) y, como si fuera poco, te cuenta lo que es divino y lo que es humano, ¿tsí?, porque como te digo una cosa te digo la otra. Es que hay cosas que ni qué.
Hacía meses que no publicábamos nuestra setsual setsión El comunicado de prensa de la semana, pero sabemos que nuestros lectores sabrán agradecer este etsitante regreso, sobre todo por frases de Tulio tan deliciosas como esta: "Pasé de ser un humano de grosera percepción a convertirme en un sibarita de percepción sutil (y eso que apenas estoy aprendiendo)". O esta, con un nivel poético que sólo es posible después de una borrachera con vino Cariñoso con pitillo: "De pronto, y sin proponérmelo, el aroma del vino empezó a tomar forma física, y me permitió descubrir la historia de amor silenciosa que existía entre el vino y mi alma (hasta ese entonces ajena para mí). ¿Qué puedo decir? De repente… desperté".
Definitivamente, todo lo malo vuelve:

De: tuliozuluaga1@xxxxxxxxxx.xxx
Enviado el: miércoles, 31 de agosto de 2011 09:17 a.m.
Para: tuliozuluaga1@xxxxxxxxxxxx.xxx
Asunto: Una “Crítica Chiquitica” para Dislicores

Recuerda, esta noche a las 10.40pm, por TeleAntioquia... Mundo diVINO, el programa para aprenderlo todo acerca del maravilloso mundo de los vinos.
Una “Crítica Chiquitica” para Dislicores

El mundo del vino está lleno de misticismo y amor; de leyenda y poesía…
Hace unos días, un amigo me preguntó: “Tulio, ¿qué es para ti el mundo del vino?”  En ese momento soportaba entre mis dedos una amplia copa, en cuyo vientre reposaba uno de los vinos más maravillosos que he probado (La Celia Supremo).  Respondí: "Hay reglas que no se aplican allí, no hay manera.  Es un mundo que vive más en lo espiritual que en lo mundano. Realidades expresadas en un lenguaje lleno de fantasía, que a su vez, hacen que la vida se vea más justa y placentera: Rescata su valor divino. La voz de un pueblo que se disuelve en la boca. Filosofía, cultura, arte.  Son sutiles las líneas que hacen la diferencia, lo real y lo divino fundido en un solo abrazo. Todo allí se define en el corazón: El bien y el mal, la noche y el día, el principio y el fin están descritos en el sabor, en el aroma, en la textura.  Y lo que no es, se diluye tras el corcho.  Es un mundo en el que la mentira no tiene cabida, en donde lo falso ha sido desterrado y cuyos únicos reyes y Dioses, son los sentidos.  Lo que ocurre después de cada sorbo de vino es una experiencia individual y puramente espiritual... Horrorizado me miró, quizás esperaba una respuesta sencilla.   ¿Y aprendiste todo eso en Chile y Argentina?

Mi historia y el vino… (Esto es más increíble)
Mi pasión, por el mundo del vino, nació lejos de los viñedos y de las cálidas brizas de los terroirs en donde la uva alcanza la vida.  Solo fue abrir mi mente y mi corazón para descubrir lugares geográficos, que inexplicablemente se hallaban alojados en mi corazón (no sé si producto de alguna vida pasada, o por aquello de la memoria genética de mis ancestros europeos).  Lo cierto es que me convertí en un viajero desde el primer momento y sorbo.  Cada cata, degustación o muestra a la que asistía como invitado, suponía para mí, un subjetivo viaje de los sentidos (el que puede llevarte a lejanas tierras, sin necesidad de empacar maletas y volar).  Gracias a esta comprensión y a lo que el vino me ofreció desde ese primer momento, he llegado a convertirme en un aventurero capaz de cruzar cualquier frontera con tan solo sentir el aroma de un especiado Malbec.  “Viajar  físicamente, resulta fácil; pero viajar usando como único vehículo los sentidos… Ese es el verdadero reto”.   (Y el vino lo hace posible)

Pues bien, esto lo aprendí, no en Chile, ni en Argentina ni en España.  Ni siquiera fue necesario beberme una enciclopedia de vinos o tomar clases con algún especialista.  He aquí lo maravilloso de este asunto:  Lo aprendí con la gente de Dislicores en la ciudad de Medellín de la manera más inesperada: Me encontraba en la mesa de algún restaurante con una copa entre los dedos, escuchando al  turco mientras hablaba sobre su notoria pasión. Yo escuchaba entusiasmado, con los ojos cerrados y la nariz metida en la copa.  De pronto, y sin proponérmelo, el aroma del vino empezó a tomar forma física, y me permitió descubrir la historia de amor silenciosa que existía entre el vino y mi alma (hasta ese entonces ajena para mí).  ¿Qué puedo decir? De repente… desperté.

Pero no solo fue el vino por el vino, debo reconocer.  Muchos amigos me legaron también sus conocimientos y llenaron mi boca y mi espíritu con los dulces taninos de la verdad. Ese fue el primer paso, antes de mi sencilla iluminación.  Ellos, sin darse cuenta, generaron un gran Big Bang y lograron este universo que ahora borbotea en mi corazón.  Sus nombres, para mí, saben también a poesía: Gracias Sebastián, Gracias Luis Fernando, Gracias Chepe, Gracias Juan Martín.  Yo era uno antes de conocerlos y otro después.   Pasé de ser un humano de grosera percepción a convertirme en un sibarita de percepción sutil (y eso que apenas estoy aprendiendo). Repito: Esto no sucedió ni en Chile, ni en Argentina ni en España.  Sucedió aquí, en sus corazones y en el mío. Sucedió en mi patria, a muchos miles de kilómetros del viñedo más cercano.  “Esto es lo grandioso del asunto del vino”: Tan misterioso, incomprensible y excitante como el verdadero amor.

Me despido, recordando a otro magnífico ser humano, Antonio Giraldo, quien me dijo alguna vez: “El vino es tan bueno que cura hasta las heridas del corazón”.  ¿Qué otra medicina logra semejante resultado?  Gracias a este Enólogo de la casa Dislicores (yo preferiría llamarlo artista), descubrí que hacer vinos, es más bien como cocinar poemas.  No se puede dejar de lado lo científico, cierto; pero sin lo artístico, el vino no tendría estos misteriosos sabores y aromas que emanan de la tierra.  Sin el alma del enólogo envuelta en todo este proceso, no habría forma de capturar tanta belleza.  Sin esto, sin el sentimiento y la elevación del espíritu a la hora de vinificar, el jugo de la uva, no sería más que una receta, y de ser así, no se habrían escrito, moldeado o pintado muchas de las grandes obras de la humanidad… Tulio Zuloaga.

Ahora los invito a conocer La Gazzeta de Dislicores, y a enamorarse, como yo, de este fabuloso mundo.  Entra a: http://www.dislicores.com/site/LaGazzeta/tabid/91/Default.aspx

9 comentarios:

  1. Yo no entiendo: ¿no les gusta comer deli, bobas?

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  2. NO JODAN, TANTO TIEMPO SIN POSTEAR Y VUELVEN CON ESTA POBRE PENDEJADA? ¿ES QUE EN EL PAÍS NO ESTÁ PASANDO NADA? ¿Y LA REFORMA MARRANERA A LA EDUCACIÓN? ¿Y LA PEYE MINERÍA? NO, APAGUEN Y SUERTE, CON LO QUE VIENEN A SALIR... si, ya sé, son bobos, en otras entradas no lo parecen tanto, por eso cuando la clavaban (inserten aquí su chiste favorito) con un post trataba de leerlos al otro día, a ver si se hacían dos seguidoas... pero no. Hasta muy muy luego.

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  3. Ay, a mi si me parace chevere que a veces la bobada sea como la sección de entretenimiento. Si quieren cosas serias, lean la silla vacia.

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  4. Posteo flojísimo, como el vientre de Tulio.

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  5. ¿Y ahora quién se aguantará a estas ridículas estrellitas comprando 4x4 y mandándose a poner tetas con el millonario premio del ministerio de incultura?
    Felicitaciones niñitas mas burgueses que Parody, todos los lectores sntimos envida (pero de la buena, o de la fina).
    ¿qué sienten ahora que son mas millonarias que Julio Mario?

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  6. http://miinfiernoindividual.blogspot.com/

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  7. jejeje a mi si me gusto, ustedes escriben las lineas que hacen la diferencia (guiño, guiño), aunque practicamente lo unico que hicieron fue copiar y pegar lo que escribio este imbecil (al que los amigos le llenan la boca), para hacerme reir un buen rato

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  8. Uy no no no, que programa tan aburrido, imaginense una cita con esa cucha Liliana

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  9. ¿Tulio Zuloaga es paisa?????
    Yo creí que era más costeño que el suero...

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