martes, 14 de septiembre de 2010

La Bobada Retro: el rincón penumbroso de Rosario Tijeras

En La Bobada Literaria, como ya saben, nos gusta mirarnos atrás. Por eso hoy les traemos este delicioso fragmento que, aunque muchos creen de lo mejor que se ha escrito en Colombia, francamente es de lo peor. Como podrá notar el lector desprevenido que tenga la mala suerte de leerlo e identificar su estilo de poesía barata y repeticiones gratuitas, se trata de unas líneas de Jorge Franco, escritor con un talento inversamente proporcional al tamaño de sus cejas, que es perfecto para la mayoría de nuestros productores de cine y televisión, los periodistas de las noticias del estreñimiento y los jurados de los premios Tv y Novelas.

Con frases que pretenden irreverencia pero están pésimamente redactadas ("Con la displicencia que aprendieron sueltan su interrogatorio como si yo fuera el criminal y no ellos [los policías]"), el fragmento es una enorme incoherencia que va creciendo a medida que Antonio –un evidente alter ego del lego del autor– contesta a las preguntas que le acaban de hacer como si hubiera aprendido de memoria las respuestas a un examen. La inverosimilitud tiene su apogeo cuando este tremendo ñoñazo les dice a los policías –en un hospital de Medellín, en los años 90– que en lugar de preguntarle "carajadas" se vayan a buscar al verdadero culpable, tras lo que se da media vuelta sin recibir un solo bolillazo en la cabeza.

La edición de Norma de la que extraemos el fragmento, además, incluye en la contrasolapa la joya de que la novela está escrita "con la novedosa técnica del flashback", lo que nos da una perfecta idea de por qué el editor se dejó meter semejante gol: no sólo no conocía nada de la literatura colombiana o universal, sino que pensaba que las magdalenas de Proust debían ser el panecillo de una región francesa. Sin nada más que agregar que la dedicatoria del libro ("Para Catalina, alegre como su sonrisa, como sus ojos que me recuerdan los de Rosario"), los dejamos con esta bobada retro que todavía no nos deja cerrar las bocas:
Afuera había por lo menos una docena de tombos. Por un instante pensé que nos habían montado todo un operativo, como los de las buenas épocas en que me dio por acompañar a Emilio y a Rosario en sus locuras.
-No se asuste –me dijo la enfermera al verme la cara-. Los fines de semana hay más policías que médicos.
Me señaló a los que estaban encargados de nuestro caso: un par de oficiales opacos, como sus caras, como sus uniformes. Con la displicencia que aprendieron sueltan su interrogatorio como si yo fuera el criminal y no ellos. Que por qué la mató, con qué le disparó, quién era la muerta, qué parentesco o relación tenía conmigo, dónde estaba el arma asesina, dónde estaban mis cómplices, que si estaba borracho, que quedaba detenido, que los acompañara por sospechoso.
-Yo no he matado a nadie, tampoco he disparado, muerta no hay porque todavía está viva, se llama Rosario y es amiga mía, no tengo arma y mucho menos asesina, no tengo cómplices porque el que disparó fue otro, ya no estoy borracho porque
con el susto se me bajaron los tragos, y en lugar de estar preguntándome carajadas y buscando donde no es, deberían dedicarse a coger al que nos metió en esto –les dije.
Di media vuelta sin importarme lo que pudieran hacer. Me gritaron que no me fuera creyendo tan machito, que más tarde nos veríamos otra vez, y volví a mi rincón penumbroso, más cerca de ella.
-Rosario –no me cansaba de repetir-, Rosario.

6 comentarios:

  1. Este man es el mismo que escribe los "guiones" de "Sin tetas no hay paraíso", "Las muñecas de la mafia" y la novela de Marbelle, ¿no cierto?

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  2. Y la televisión no se cansa de repetir "Rosario"...

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  3. hay cosas más tristes, por ejemplo que los directores de talleres de escritura del distrito, proclamen que la escritura de Franco es la que debe ser, que ese fiambre de mierda llamado novela, es la forma correcta de hacer literatura... los invito a que le pregunten a Nahum Montt, y el les responderá que Franco es un genio de talento incomparable... muy mal, muuuy mal...

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  4. perfecto ejemplo de la ignorancia cultural, en un pais donde hay mas minas quiebrapatas que colegios

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  5. No puedo creer lo que acabo de leer. Esto es entretenido, pero por las razones equivocadas.

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  6. "muerta no hay porque todavía está viva, se llama Rosario y es amiga mía" eso parece sacado de un melomerengue de Gildardo Montoya o del Paisa Gozón, grandes precursores. Creo que lo usaré en uno de mis próximos exitazos.

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