lunes, 26 de julio de 2010

La Bobada en la Fiera del Libro

Pasó el bicentenario y el país sigue siendo exactamente el mismo de hace 200 años pero con una clara tendencia a empeorar. Sin embargo, hay asomos de esperanza –o al menos de evidente cansancio– en este lindo terruño: el 33% de los colombianos no quiere saber más del enano que está escribiendo el discurso deposición de Juan Manuel Santos, el 40% está harto de Jota Mario Valencia, el 30% detesta los blogs de Hoja Blanca –incluyendo el de nuestro prohombre Gabriel Ruiz-Navarro– y un apabullante 64% está cansado de la calumnia de opinión de José Obdulio Gaviria. El pueblo se ha pronunciado y, demostrando que no aprende, quiere que nosotras sigamos escribiendo más entradas en esta página.

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No hay que ser Daniel Coronell para imaginarse que detrás de La Bobada Literaria siempre se escondió un sueño: participar en la Fiera del Libro que este año, para mayor placer, cuenta con la jefatura de prensa de nuestra pariente más ilustre, Catalina Ruiz-Navarro. Gracias a ella, logramos conseguir un stand junto a los baños –el sitio más visitado de este reputado evento escultural–, en el que venderemos las ediciones piratas que hemos venido preparando desde hace casi un año, cuando fundamos este ridículo blog.

A nuestros bobos seguidores les anunciamos que el enano® estará dando autógrafos en los libros de Ingreed, Isabella y Juanma. Además, 8000 en persona estará haciendo caricaturas y escribiendo el nombre de los asistentes en glúfico –el idioma de Nubeluz que, al menos, tiene más lógica que escribir en élfico–, haciendo lo único que le interesa a la mayoría de los asistentes a esta feria: ver cualquier cosa que no sean libros. Como adelanto, presentamos nuestra encuesta de la semana –en la que pueden votar arriba a la derecha–:

¿Quién cree que fue el escritor que escribió su destino?
  1. Mario Mendoza, porque mi vida parece una incursión a las lóbregas tinieblas del Hades.
  2. Paulo Coelho, porque relleno mi vida con frases de pensadores orientales para que parezca profunda.
  3. Gusta Bobo Lívar, porque mi vida dio un vuelco desde que apareció la silicona.
  4. Jorge Franco, porque mi vida está muy mal escrita.
  5. Shakespeare, porque al final todos se mueren.
Sabemos que en tiempos de crisis hay que creer en mística y dejarse estafar con cualquier forma de esperanza, así que estamos convencidas de que ustedes, bobos lectores, creen que el destino está escrito.

De todas formas, para los bibliófilos, tenemos una lista de novedosas novedades muchísimo más larga que la de las editoriales tradicionales –que llevan 20 años presentando lo mismo y lo único que aumentan son los precios–, así que vayan ahorrando para adquirir esta colección de joyas de las letras y letrinas nacionales:

La primavera del patriarca. Este libro está escrito sin puntos ni comas para que el lector pierda su tiempo de un solo tirón leyendo sobre las aventuras de un personaje llamado Álvaro Uribe Vélez mientras hace campaña para ser elegido presidente de un país situado en el Caribe. Poco a poco este personaje va revelando sus dudosas relaciones con grupos insurgentes que pelean con otros grupos insurgentes y asesinan civiles, pero su curiosa visión de mundo deja claro que todo lo hace con un fin noble a pesar de la falta de escrúpulos. Al final, en un giro garciamarquiano, termina comprando una gallina y apostando tres huevos en una pelea con otra gallina.

Parece que va a escampar. Ricky Ricón Silva Romero estuvo dos meses escribiendo esta novela sobre un hombre atrapado por la lluvia en Unicentro. ¿Logrará salir? Sólo si escampa, no va y sea que se le dañe el saco de rombos.

Capricornio City. Con la ayuda de un psíquico del canal de Mauricio Puerta, Mario Mendoza descubrió que en Bogotá se esconden secretos tan turbios como el olor dulzón del basuco y su cabellera blanca y llena de canas. Esta novela fue ganadora del Premio Planeta Melmac.

Las trovas satánicas, de Los Marinillos. Este polémico texto ha sido vetado por el Padre Marianito, el Colegio (y el barrio) Calasanz de Medellín y otros telepredicadores por su clara burla del Antiguo Testamento y el Corán. La editorial afirma que un grupo de suicidas musulmanes está tras la cabeza de Los Marinillos, hecho que, sin duda, ayudará a aumentar las ventas de un libro más aburrido que La Biblia para Dummies. En exclusiva para ustedes, bobos lectores, presentamos una de las trovas:
Allá arriba en aquel alto
donde vive Jehová
se la pasa un viejo rojo
que se llama Satanás
La puta de los sicarios. No se trata de la telenovela de Rosario Tijeras. Es en realidad una versión políticamente correcta del clásico de Fernando Vallejo en la que, para orgullo de las matronas antioqueñas, el protagonista es tan heterosexual y putero que hasta le prende una venérea a su esposa, motivo suficiente para que ella mande un sicario a darle piso.

Ilona se va cuando escampa. Después del éxito en Pekín de la cinta de Sergio Cabrera, un enano fue contratado para hacer la segunda parte de una de las novelas más tediosas de la literatura colombiana. En esta entrega, aparece un nuevo personaje, Maqroll el gavillero –que será interpretado en la pantalla por Álvaro Uribe–, y Margarita Rosa de Francisco se dedica a cantarle diferentes versiones de "Gaviota" a lo largo de 150 páginas. No sabemos en qué termina porque nos quedamos dormidas.

Occidente se acaba en El Cairo. Si Oriente se acaba en una ciudad que parece un pesebre con carros y sin luces de colores, es natural que sea allí donde se acaba Occidente. Por eso, este libro busca presentar, con la consabida sensiblería de Héctor Abad, los rastros que hacen de la capital egipcia una visión del fin del mundo occidental: los locales de McDonald´s donde se venden hamburguesas de camello, las pirámides que inspiraron a los empresarios del Putumayo y los árabes borrachos en las calles que representan la doble moral que ha permeado su yermo paraíso.

Much problemo, enemigou. Con el patrocinio de esmaltes Avon, Jaime Espinal desarrolló esta obra multimediocre, que se puede leer al derecho o al revés pero, a diferencia de un palíndromo, no es más que un compendio de frases sueltas. Como este blog pero en papel.

La baladí del pajarillo. La obra póstuma de Germán Espinosa es otra muestra de su inigualable talante para dárselas de erudito con un estilo aburridito. En ella, el pajarillo se enreda en un romance con una sierva negra que lo va a llevar a situaciones insospechadas, como hablar en diez páginas sobre la poesía de Torquato Tasso o divagar sobre la orientación sexual de Tirant lo Blanc con el único fin de quejarse después porque estas cosas no le interesan a nadie más que al autor.

Hola, Suramérica, hola. Una colección de relatos escritos con el estilo de la revista española Hola repasa cada uno de los países sudamericanos desde la óptica de un emigrado que vuelve a su tierra natal. Gracias al talento de Óscar Coñazos, este libro termina siendo una obra a medio camino entre una telenovela brasilera y una columna de Poncho Rentería.

Con remedio. Para callarle la boca a quienes lo acusan de one-hit wonder, Antonio Caballero decidió embarcarse en una nueva novela. 500 páginas después, lo que encontramos es que Escobar tuvo un hijo con una puta del Centro y el niño creció para ser presidente del Senado.

Camándula Cuchillos. Utilizando la novedosa técnica del flush back –que consiste en meter la mano en el inodoro después de desocuparlo–, Jorge Franco francamente ya no sabe qué más venderle a RCN.

Putas, pajas y tres libros humeantes. El performance literario, Efraím Medina, vuelve a las librerías con una obra llena de nada. Cada vez más convencido de su originalidad, el neoyorquino nacido en Cartagena hace un compendio de groserías, descripciones de su propia verga y comparaciones de sí mismo con Syd Vicious e Iggy Pop. No sobra aclarar que, como fracaso, este libro será un éxito.

Los caballos las prefieren bruscas. Dejamos para el final el que sin duda será nuestro best seller: la nueva idea que Isabella Santodomingo le pidió al enano® que escribiera por ella. Chistes de stand-up comedy o de cadenas de correo electrónico convertidos en artículos de revista de peluquería fueron pegados con curitas para contar la historia de una mujer tan inteligente que sólo necesita dárselo a todo el mundo para triunfar.

3 comentarios:

  1. faltó algo de Mario Mendoza y de las "prometedoras promesas" como las llaman ustedes

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  2. ¿y van a cobrar como si fueran de Alfaguara?

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  3. Las mejores fueron la del de Ricky Ricón, "Parece que va a escampar", Y las hamburguesas de camello en el McDonald´s del Cairo. Las peores fueron La puta de los sicarios y la de La baladí del pajarillo, ahí acusan ingenio lego. Las trovas satánicas, de Los Marinillos. Adiós, saludos desde el Colegio (y el barrio) Calasanz de Medellín

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